decripcion1

Blog personal de Ester y Joel sobre su travesía en bici por Japón durante Septiembre 2015

sábado, 5 de septiembre de 2015

Primer día de pedaléo en Japón (o cómo pedalear con un sólo pié)


Llegamos conforme a lo planeado al aeropuerto Narita de Tokyo, después de 5 horas de escala en Istanbul, y de pinchemil horas de avión. He de decir que aunque no fue grato, ha sido uno de los mejores vuelos largos que he tenido. Turkish Airlines provee a cada pasajero con un sistema de entretenimiento digno de 'Business Class', y lo que provablemente sea la mejor comida que he tenido en un avión! Air France tiene buena comida (y vino francés!), pero Trukish me ha sorprendido con platos exóticos y deliciosos! Y vino francés! Basta de publicidad, que no me pagan nada!

Las bicis viajaron en sus bolsas de sandwich, y llegaron casi perfectas: Un leve rallón en el manillar de Ester (debí haber puesto mas plastico burbuja!) Y mi pedal: Cometí el error de dejar puestos los pedales hacia adentro, en lugar de retirarlos del todo. El pedal izquierdo de mi bici estaba doblado, como si hubiera recibido un golpe. No estaba demasiado doblado, pero lo suficiente para que no entrara por completo en su rosca. Se podía pedalear, no le di mucha importancia...

A la mañana siguiente, 8am hora local, 1am hora de Barcelona, terminamos de re empacar y comenzamos a preparar las bicis. 4 horas después salíamos dirección Chiba para luego recorrer la costa hasta Tokyo Centro, donde nos esperaría nuestro anfitrión de Warm Showers (es una versión de couch surfing pero para viajeros ciclistas). 

El viaje hasta Chiba, sin contratiempos. Bonitos paisajes, carreteras muy estrechas, casitas típicas, pero finalmente una carretera secundaria común!



Chiba!

Paramos a comer justo antes de llegar a Chiba, en un lugar que aunque estaba cerrando, nos recibió con ese encanto y amabilidad tan particular de los japoneses. La cocinera, una mujer encantadora que con su poco inglés hizo todo lo posible para explicarnos la comida y los menús, fue el verdadero primer contacto amistoso con un oriundo. Al irnos salió a despedirnos y nos regaló unos caramelos "para el viaje".

Una vez en Chiba, pensaba que estábamos ya por llegar. Error. Faltaba mas de la mitad! Pero como todo era nuevo y hermoso, no importaba! Se hizo de noche.


Vale, hubo algunas partes no tan bonitas, muy industriales, o muy transitadas, oscuras... pero el verdadero problema fue que en medio de estas zonas, mi pedal, aquél que estaba ligeramente doblado, empezó a bailar...

Para no hacer el cuento (más) largo, aún nos faltaban 10 o 15 km para llegar a nuestro destino, cuando mi pedal se salió de su sitio por completo: el leve doblez que tenía, más 80 km de pedaleo, trasroscaron la biela por completo, dejándola inutilizable. Eran como las 11 de la noche, en medio del centro, y aún faltaba un cacho para llegar a una dirección ajena, que no aparecía en el GPS. Pero no había nada que hacer. Solo podíamos continuar pedaleando, yo con un sólo pie, hasta la isla Tenozzu.


Cuando llegamos a la isla, lo del pedal ya me causaba gracia. Pero estábamos realmente cansados y no estábamos seguros de como llegar nuestro destino. Mientras consultábamos el mapa en el teléfono, de la nada, a media noche, una joven se nos acercó a preguntar si necesitábamos ayuda. Tras explicarle nuestra situación, nos acompañó a la policía, y entre el amable agente, y la chica bilingüe, logramos dar con la dirección en un mapa y pudimos llegar sin problema. Llegamos como a la 1am. Que vergüenza tocar el timbre de una casa japonesa a esas horas, que te abra el hijo mayor en calzoncillos y con su adormilada amabilidad te invite a pasar...

Primer día: 92km!











2 comentarios:

  1. Les deseo que ya no haya más contratiempos, reciban un gran abrazo.
    y reporten ¡¿qué más?! la hacen de emoción, parece de telenovela.
    ¡FELIZ VIAJE!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Kapu! Hay algunos contratiempos meteorológicos, pero todo ira bien.

      Eliminar